El físico tiene un valor muy diferente en hombres y mujeres. Mientras en ellos la elegancia se resume en ir bien peinado y con un traje de chaqueta, en ellas supone enseñar medio cuerpo, maquillarse, llevar bisutería, un peinado elaborado y por supuesto ni un solo pelo donde no deba.En el día a día es exactamente igual, vamos a hacer un repaso.

Empecemos por el pelo, ellos pueden ir con el pelo corto, algo simple es suficiente, pero para la mujer, por norma general, está mejor visto el pelo largo, que implica más cuidados y tiempo. Pero no queda aquí, cuando pasan los años y empiezan a salir las canas, en los hombres resulta que da un toque interesante pero en las mujeres es un símbolo de vejez que debe ser ocultado inmediatamente, tienen que teñirse. Y mejor no entrar en el tema de la calvicie.

Un punto importante: el maquillaje. Algo que para los hombres no existe, pero en cambio para las mujeres hay gran variedad: lápiz de ojos, eyeliner, sombra de ojos, rimmel, base, iluminador, pintalabios, perfilador, lápiz de labios, de cejas, colorete… una lista interminable. Muchas mujeres son incapaces de salir de su casa sin algo de maquillaje.

Otro tema complicado: la depilación. Ellas no pueden llevar pelos en las piernas, ellos sí. Deben depilarse las cejas ¡y cuidado con ese bigote si no quieres escuchar bromas! Que una mujer no se afeite las axilas está visto como falta de higiene, en los hombres en cambio no. Es como una ley no escrita.

El universo de las cremas. Si profundizas en este mundo encuentras una variedad casi tan amplia como la del maquillaje: antiarrugas, reafirmantes, hidratantes, anticelulitis, antiestrías, exfoliantes, para pieles secas, grasas, sensibles, mixtas, maduras y un largo etcétera.

Adelgaza. Todos los productos dietéticos y bajos en grasa están hechos para las mujeres, y la publicidad de centros de adelgazamiento va dirigida a mujeres. En ellos no está mal visto tener «kilos de más». Un claro ejemplo es que se evita usar la palabra gordo, la barriga se sustituye por «la curva de la felicidad» y lo más fuerte es la invención de la palabra «fofisano». Para los hombres no existe la operación bikini.

Tan horrible es no cumplir estos requisitos que incluso en la publicidad se ocultan. En los anuncios de productos lights las mujeres están ya delgadas; en los anuncios de maquillaje ya están maquilladas; en los de crema antiarrugas salen chicas de menos de treinta sin una sola arruguita; en los de tintes todas tienen grandes melenas brillantes sin una sola cana ¡y en los anuncios de depilación no tienen ni un solo pelo!